Alrededor del 80% del envejecimiento de nuestra piel proviene de factores ambientales y de estilo de vida, debido a esto los antioxidantes cumplen un papel fundamental para la protección de la piel ya que actúan como escudos protectores de ella.
Imagina que nuestras células son pequeñas fábricas que generan “especies reactivas de oxígeno” (ROS), que pueden dañar la piel. Los antioxidantes actúan como héroes que combaten estas amenazas. ¿Cómo lo hacen? Bueno, protegen nuestras células del estrés oxidativo, un proceso que puede dañar las proteínas, grasas y hasta el ADN de nuestras células, Así es como la vitamina A, C, ácido ferúlico y otros fitonutrientes se convierten en héroes naturales que luchan contra la inflamación y los radicales libres que con el tiempo, pueden hacer que la piel luzca cansada y envejecida.
Por lo tanto, cuando busques productos para el cuidado de la piel, busca aquellos que tengan una gran fuente de antioxidantes. Estos pequeños pero poderosos elementos pueden ser la clave para una piel más luminosa, firme y protegida contra el paso del tiempo y los factores externos que la dañan.
